Música

Hoy un gran amigo, Virgilio Victoria (médico y compañero de trabajo), me dio la noticia.
Richard Wright, el tecladista de Pink Floyd, había dejado de existir.
Soy fanático de esta banda. Y sentí que un sueño se había roto en mil pedazos: nunca más podré cumplir el deseo de ver en vivo a Pink Floyd. Sin Richard, no será lo mismo.
Después de ese terrible sentimiento me recompuse. Porque me consolé que, al menos, las obras del grupo inglés estarán ahí cuando quiera acordarme de ellos.
Después pensé en otras vidas que se habían apagado y la familia del rugby tristemente golpeada este año.
La última noticias, con la muerte de Silvestre Tete Gosio, el hermano menor de Agustín, el Canario, tryman de la división superior de Newman. Con el murieron Bautista Pereyra Iraola, también juvenil de Newman, y Francisco Oxenford, que era compañero del colegio en un accidente automovilístico.
Además, la desgracia de Juan Cruz Migliore (CUBA) en pleno partido y de Andrés López Astigarra (Almafuerte, Buenos Aires) luego de un encuentro, el rugby argentino sufrió también la desgracia de perder a Santiago San Martín (Pueyrredón, Bs. As.) y tres integrantes de la M23 de Mendoza Rugby Club y Matías Landreau, de la M16 de Belgrano (Bs. As.).
Tucumán también fue golpeado. Sorprendió a todos la sorpresiva muerte de Matías Levy, jugador de la Pre-Intermedia de Bajo Hondo. Un infarto se lo llevó con sólo 37 años y siete hijos que extrañarán a su papá.
No soy de reflejar este tipo de acontecimientos porque creo que son muy privados.
Pero quiero dejarles esta canción, en memoria de todos. Fue la última vez que se reunió el grupo en el concierto Live Aid.

Wish you were here / Pink Floyd