Lo que dejó el Regional

Ya pasaron más de 48 horas desde que Universitario se consagró campeón Regional 2007 (buena observación de Alvaro, no sólo campeón tucumano) y uno puede analizar un poco mejor lo que sucedió en la cancha de Lawn Tennis el domingo pasado.
Será corto pero como dice la frase "lo bueno si breve, dos veces bueno".
Hubo dos cosas que me quedaron grabadas a pleno en la retina el día del partido entre Cardenales y Universitario. Fue antes, durante y después.
El colorido de las hinchadas y su sano aliento.
El buen juego que hicieron ambos equipos.
Esto podría resumirse en una sola palabra: respeto.
Respeto por el público que se acercó a presenciar un espectáculo y que lo dieron en toda su dimensión, tanto en las tribunas como en la cancha.
En las gradas se pudo ver a las dos hinchadas alentando permanentemente a su equipo, sin ocasionar ningún agravio hacia su rival ni provocación alguna. Fue mutuo.
Los terceros que tuvimos el privilegio de estar en la cancha, disfrutamos de los cantos "futboleros" sin la consecuencia que muchas veces provoca.
Por el lado de los equipos, el respeto por el juego, porque jugaron al rugby en toda su dimensión. Se entregaron al 100 por ciento y nos regalaron uno de los mejores partidos que ví en los últimos tiempos en el rugby tucumano, junto con el condimento emotivo de que al finalizar el partido, uno de los dos sería proclamado campeón.
Esta vez le toco a Universitario. Pero a Cardenales no le habría quedado nada mal el traje.
Prometí que sería breve... Así que...
Hasta la próxima.
Le dejo algunas imágenes de lo que dejó el partido, como el emotivo abrazo del apertura de Universitario, Diego Más, con Cacho Valdez.

La chicas bonitas, dijero presente, como siempre pasa en los partidos de rugby.

Y... la economía tucumana no da para comprarle regalos a mamá y también poder pagar la entrada a la cancha. Por eso es válido ver la final desde el alambrado también.