Mesurada alegría la del capitán. "Es que todavía queda un partido", señala con la gravedad de su voz pero inmediatamente pregunta cómo lo había reconocido si el diario había sacado una foto que no era la suya.Arturo Mimessi, analizaba el partido así. “Fue un partido duro aunque el resultado no lo refleje. Ellos nos aguantaron hasta los quince minutos del segundo tiempo y de ahí se nos abrieron los espacios. Incluso hasta pudimos hacer un scrum try. Habíamos planteado desgastar con los forwards y después abrir la cancha pero nos encontramos con dos tries temprano. Pienso que ellos, a pesar de ir nosotros tres tries arriba, nos jugaron bien", aseguró sin restarle méritos al rival.
Cuando se le advierte que fallaron en el line y el scrum, agrupamientos importantes para la obtención de la pelota, argumentó que "es cierto. Tuvimos problemas en esas formaciones. Sin embargo estuvimos bien en defensa y en ataque. Ahora hay que ver este partido, para saber donde estuvieron los errores, corregirlos y minimizarlos para el próximo partido y en las semifinales también”.
Con un cuello ortopédico que no lo dejaba mover la zona golpeada, Juan Avila no sabía si le dolía más su cuello o la derrota.
'¿Se puede revertir esto Juan?' se le preguntó. Con una sonrisa intentaba una explicación.
"Es que es muy complicado con tantos puntos encima. Trabajaremos en la semana para ver si se puede ganar y si no, pensaremos en el año que viene", contestó.
Sin embargo, el golpe que tuvo el hoocker hace dudar su presencia en Salta.
"Tengo un golpe en el cuello cuando fui a tacklear y ahora veremos lo que dice el médico, si estoy para jugar”, señaló y se despidió.
El final lo dejo para el capitán de Lince. Javier o Gregorio, como más le guste, es siempre frontal. No da vueltas cuando tiene que decir las cosas. Eso aprecio a la hora de un reportaje. Tal vez porque los años de periodismo me cansaron de los famosos "cassette" o de los que prefieren decir lo políticamente correcto.
Con Perdiguero eso no sucede. Enciendo el grabador y sólo le pregunto qué paso para que me defina el partido: “Tres errores, tres tries. Y de ahí empezamos a jugar contra nosotros que es el peor rival. Comienzan las desconcentraciones, las malas caras, las puteadas, empezás a jugar de cualquier lado, te desconcentrás y chau... fallamos en el tackle en los forwards, en los tres cuartos... mal", dice el full back.
Y continúa. Necesita descargarse.
"Siempre es feo perder pero hay que tener en cuenta que ellos son superiores, son un seleccionado. Salvo dos o tres jugadores, todos son jugadores de selección. Nosotros somos un equipo en formación, sabíamos a lo que nos enfrentábamos pero perder por errores nuestros, es feo. Fijate que el primer try es una pelota que abrimos rápido un penal, en vez de ir al line, la perdemos y es el primer try de ellos. Después el segundo es una indecisión de tres jugadores –es la que yo no llego-, la dejamos picar y nos apoyan bajo los palos. Después hay otra pelota que ellos nos interceptan....seguí sumando. Cuando vos ganás es todo lindo y cuando perdés, sos un desastre...”
Contundente, directo. Como la derrota. Pero con dignidad. Esa que supieron tener algunos que saludaron con hidalguía la superioridad del rival.
Porque también es de hombre reconocer la derrota. Y este grupo de Lince, es un grupo de hombres.
Ya tendrán tiempo de lamer heridas, recuperarse y trabajar para lo que viene que no séra fácil.
Así como lo hizo Universitario de Salta el año pasado y este presente que goza ahora no es casualidad.
Un abrazo
Hasta la próxima
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